...y todo lo que sigue.

Lo expliqué en el primer post del mes, y ahora escribo éste, el último, para cerrarlo como se merece.

Agosto termina... y no decepcionó. Fue un mes interesante, novedoso, emotivo y que francamente pasó demasiado rápido.

Estoy contemplando mi actitud habitual ante las pérdidas que, como todo el mundo, llego a sufrir. He estado pensando mucho en eso, y estoy tratando de cambiar. En estos últimos 30 días he sentido dos en particular que me han dolido. Una fue cuando me despedí de el "Capi", mi terapista físico con quién trabajé desde febrero. Estoy genuinamente contento por él, sin embargo, y le deseo a él y su familia la mejor de las fortunas a dónde quiera que vayan. La otra... es muy personal, y no sucedió en este mes realmente. No tengo más que decir.

Trato de enfocarme en las cosas buenas que están pasando y en las ganancias en cambio. Estoy viendo a mi padre con mucho mayor frecuencia. Realmente valoro todo lo que me está ayudando, junto con los cambios que él mismo ha mostrado para conseguir ese fin.

Estoy cuidándome. Estoy aprendiendo a quererme. Trato de tener orden, disciplina. Estoy reeducándome. Estoy aprendiendo cosas sobre mí; me faltan algunas, estoy seguro, pero siento que me va a servir mucho para seguir adelante. Estoy haciendo el intento. Tengo dudas, claro. Tengo también urgencia de muchas cosas y muchos momentos pero recuerdo, y me lo repito todos los días, que debo tener paciencia y desearlo mucho, desearlo todo.

Personas muy importantes para mí tuvieron sus cumpleaños. Traté de hacerles sentir mi cariño y creo que lo logré. Otra está viviendo un momento muy importante de su vida al haberse convertido, de nuevo, en madre. Otras más están muy cerca de algo similar. Estoy feliz por todos ellos.

Estoy haciendo un esfuerzo por romper viejos vicios y permitirme sonreírle a la vida. Estoy entusiasmado porque el fut americano está a punto de empezar. Estoy pensando en cortarme el cabello, aunque sea un poco. Estoy estudiando para ser admitido y hacer una carrera en línea. El curso propedéutico ya lleva más de dos semanas y cada vez me siento más a gusto. Entregué ya mis primeras tareas; de hecho tengo tres más que entregar éste jueves y... estoy retrasado.

Creo que es mejor terminar aquí por hoy y ponerme a trabajar en eso. Sólo quiero decir algo más:

Estoy tranquilo. Estoy conmigo... y estoy listo.

Para todo lo que sigue.